UN HOMENAJE EN CLAVE SOBERANISTA A
NUESTROS MUERTOS EN GERNIKA
El 26 de abril se cumplirá el 78 aniversario del
bombardeo que la aviación de la Alemania nazi realizó sobre la ciudad vasca de
Gernika, que la destruyó en un 70 %, quedando solamente en pie el edificio de
la estación de trenes y la Casa de Juntas. Según las estadísticas del gobierno
vasco las víctimas fueron 1.654,
mientras que el informe oficial emitido por el gobierno franquista da
cuenta solamente de unos 12 decesos.
¿Porqué Guernica? Una primera reflexión nos llevaría a
la conclusión de que la ciudad de Gernika forma parte del área de resistencia
republicana del norte, la cual, intentaba penosamente contener el avance de los
insurgentes fascistas que se habían levantado en el norte de África en julio de
1936, al mando de Francisco Franco. Pero indudablemente la elección de Gernika
no fue al azar, sino que la operación tuvo como objetivo principal minar la moral de los gudaris y de un pueblo
aguerrido y patriota, porque Gernika, constituye uno de los símbolos más
preciados de los vascos, por su legendario roble, que representa la tenacidad y
firmeza de nuestro pueblo.
No debemos olvidar que Gernika ha sido sinónimo de la
lucha y la resistencia heroica de
nuestro pueblo, el cual, de ninguna manera estaba dispuesto a perder su
libertad. En este sentido, como un homenaje
a estos patriotas vascos, debemos poner fin a nuestra indiferencia y
falta de compromiso con el país, que se resume, en haber pedido esos gestos
solidarios y de entrega que nuestros antepasados mostraron hace 78 años atrás.
Por lo antes enunciado, no podemos mirar hacia otro
lado y comenzar a trabajar en clave nacional. En tal sentido, ya ha llegado
el momento de pasar del análisis y la
dialéctica a la acción, siempre por las vías pacíficas y democráticas,
desarrollando una estrategia a favor de la Independencia que involucre a la
mayoría de la ciudadanía vasca, donde no deben faltar acciones de desobediencia
civil y la movilización permanente, a lo
cual, hay que añadir acciones concretas en todos los Foros Internacionales,
Universidades y demás Instituciones del mundo,
para qué los estados involucrados en el conflicto político vasco,
accedan de una vez por todas a resolver en contencioso, por medio del diálogo.
La ciudadanía vasca de los siete Herrialdes más la
Diáspora, serán el motor de esta acción política común, como otras naciones sin
estado las han llevado a cabo cuando carecían de un status político propio,
como ejemplo: (Irlanda y Armenia). Solo a
través de las acciones soberanistas de la sociedad vasca, el mundo podrá
apreciar los deseos de un pueblo de poder decidir su futuro. Por lo antes
enunciado y como punto de partida los vascos debemos tomar el
ejemplo más cercano, en un camino común, como lo está haciendo nuestra
nación hermana de Catalunya y en consecuencia preguntarnos con responsabilidad
patriótica: ¿No es la hora de Euskal Herria?
Como vascos consustanciados con los principios y
valores de nuestra nacionalidad, debemos ser consecuentes con nuestros
símbolos, como por ejemplo el “Roble de Gernika” y quizás este 78 aniversario
del genocidio, constituya una buena oportunidad, para comenzar a tejer los
mimbres necesarios entre la militancia abertzale, a partir de acordar un
proyecto de unidad en la acción, colocando los intereses de de Euskal Herria por sobre toda
intencionalidad política partidista, para que podamos comenzar a transitar un
“sendero patriótico” que nos permita
cristalizar los objetivos soberanistas de la Nación vasca. Creo humildemente,
que es el mejor homenaje que podemos realizar por nuestros muertos en Gernika.
Prof. César
Arrondo
Observatorio
de Naciones sin Estado (ONSE)
Universidad Nacional
de La Plata (UNLP)
Argentina